Serie de autorretratos y bodegón inspirada en la obra Filosofía del tocador, del Marqués de Sade, la estética rococó y ambientada en la etapa del terror de la Revolución Francesa. Son escenificaciones al estilo del tableaux vivant que narran la historia de un marqués que es delatado y traicionado por su amante, una cortesana de inclinaciones jacobinas. Estas imágenes de marcado acento queer intentan relatar un episodio ficticio y emulan las ilustraciones de las novelas de amor dieciochescas y el erotismo en los salones de la Francia de finales del siglo XVIII. Hay un tono de humor pero la referencia al mito de Tánatos y Eros es más que evidente al unir el sexo junto a la muerte, el dolor y el odio, el amor y la traición. El atrezzo de cada una de estas imágenes es propio, añadiendo mobiliario, telas o cortinas, reavivando estas escenas para dotarlas de un nuevo significado estético.